El brownie

He tenido muchos desengaños amorosos en mi vida. Con españoles y con ingleses. Pero todos tienen su parte buena (seguro que no eran para mi, porque si no está de Dios no está de Dios) y obviamente, su parte mala.

Hay uno que es para compartir, y no listillos, no es el que os pensáis!!Lo llamaré... el desengaño del brownie.

Ya es doloroso que te guste alguien que pase de ti, pero bueno, dentro de lo que cabe siempre tienes esa cosilla que te hace pensar que a lo mejor un día se da cuenta de que estáis hechos el uno para el otro, o que sólo está jugando y en el fondo te ama con toda su alma o que bueno, en verdad sí le gustas pero se cree que él a ti no y por eso no hace nada... Vamos, esas cosas que pensamos las tías, porque somos imbéciles perdidas. Pero más doloroso es estar todo el día pensando en eso y que un día te caigas de esa nube de algodón que tú solita te has creado.. y sin ayuda!!!

Era una tarde de viernes en la que trabajábamos juntos, un cliente me había invitado a un postre y yo, creyéndome simpática y que así lo enamoraría del todo, le dije de compartir ese magnifico brownie... Fue en ese momento cuando él creyó oportuno darme la (mala) noticia...

- Ana, hoy tengo que salir un poco antes...
- ¿Cómo de antes?
- A las 9..
- Eso es en 20 minutos... ¿Por qué?
- Tengo a otra esperándome...

HOLA? Cómo que a otra? Que otra? Quién es esa otra? Y por qué te espera?? Ah no, no no no no no!!! No sabía cómo reaccionar.. pero de qué vas? Ya no me amas? Ya no te vas a dar cuenta de que soy lo mejor que te ha pasado en la vida? No había más remedio... le tuve que quitar la cuchara y apartar MI brownie.. así aprenderá a no jugar con los sentimientos de la gente, hombre ya!!!!

Creo que fue ahí cuando me di cuenta de que no sería el padre de mis hijos.. una pena, podrían haber sido muy rubios!!!!