martes, 8 de mayo de 2012

Un último paseo

No siempre es oro todo lo que reluce y eso es lo que averigüé con otra de mis decepciones amorosas.

Si lo pienso, puede que sea con el que mejor me he llevado, con el que más me he reído, con el que mejores paseos he dado, el que más me ha decepcionado y el que, de cierta manera, me impulsó a venirme a Inglaterra.

Nunca lo consideré mi novio, primero porque él no me hubiera dejado y se hubiera reído de mi y segundo porque nuestra relación sólo se basaba en dar paseos. No fue una relación normal, aunque si lo pensamos duró bastante. El mismo día que lo conocí dimos un paseo que nos hizo ver la muerte... bueno, ya me conocéis, me gusta exagerar, a lo mejor no vimos la muerte pero la olimos en ese momento en el que estuvimos a punto de caernos por un acantilaillo.. que bueno, a lo mejor solo eran un par de escalones pero viene a ser lo mismo, yo olí a ese ser que viste de negro, y creedme cuando digo que él se cagó!!

Pero tuvo que ser un buen paseo, porque después de eso, quedamos más veces, muchos fines de semana durante casi un año, siempre la misma historia, nunca más que eso...Pero ya se sabe, y además me lo dijo mi madre... hay que pasear para que una relación salga adelante.. así que yo seguía ahí, al pie del cañón... hasta que un día quería más. Él nunca quiso más, o eso me parecía a mi, empezó a ver a otra gente (zorras a puñaos) y yo cada vez más mosqueada, obviamente!!

Ya se sabe, cuanto más pasan de ti, más te apetece no? Pues yo era (soy) de esas, que no quieres pan? Pues toma dos tortas!! Recuerdo el fin de semana que me dí cuenta, por fin, de que sólo le gustaba pasear, que no íbamos a ir a más... me hizo pedazos...y sólo supe reaccionar de una manera.. deseándole una sífilis tan grande que la polla se le hubiera hecho pedazos o una gangrena, también en la polla, eso siempre sirve. Te quedas tan a gusto cuando deseas algo así... es una sensación tan placentera (sobre todo cuando al tiempo te enteras que en parte se ha cumplido)... pero aun así, duele.

Hoy en día, le doy las gracias por haberse ido con todas esas guarras con las que se fue. Me hizo dar un paso que no me hubiera atrevido a dar si no hubiera sido por toda esa historia que se me quedó pequeña y a la vez grande... tan agradecida, que me atrevería a decir que volvería a pasear por esas calles... una última vez.

2 comentarios:

  1. No se porque pero esta historia me suena....Me alaga...Te Quiero...Eso querias que pusiera??? Jajajaja Mencanta que tenga esa visión de esa historia....Siempre quedará aquel acantilado jajajaja Supongo que tienes que tener para una segunda tercera y cuarta parte

    ResponderEliminar
  2. A esta historia le faltan cosas que espero que cuentes mas adelante y además tenemos que saber lo que pasó realmente con esa maldición de gangrena incluida.

    ResponderEliminar